Cómo Aceptar el Amor de Dios - Juan 3.16-21

 


Pasaje Bíblico
Juan 3:16-21 (NTV)

“16 Pues Dios amó tanto al mundo que dio a su único Hijo, para que todo el que crea en él no se pierda, sino que tenga vida eterna. 17 Dios no envió a su Hijo al mundo para condenar al mundo, sino para salvarlo por medio de él. 18 No hay condenación para todo el que cree en él. Pero todo el que no cree en él ya ha sido condenado por no haber creído en el único Hijo de Dios. 19 Y la condenación se basa en esto: la luz de Dios vino al mundo, pero la gente amó más la oscuridad que la luz, porque sus acciones eran malas. 20 Todos los que hacen el mal odian la luz y se niegan a acercarse a ella, porque temen que sus pecados queden al descubierto. 21 Pero los que hacen lo correcto se acercan a la luz para que otros puedan ver que están haciendo lo que Dios quiere.”

1. El Amor de Dios es Incondicional El amor de Dios es algo que no se basa en méritos humanos, sino en su deseo de establecer una relación con cada persona. Cuando la Biblia dice que Dios amó tanto al mundo, está hablando de un amor universal y profundo que abarca todas las barreras y límites. Dios, en su perfecta santidad, no puede tolerar el pecado; sin embargo, Él diseñó un camino de reconciliación a través de Jesús para que podamos experimentar su amor y su presencia eternamente.

2. La Naturaleza de Dios: Santidad y Justicia El amor de Dios no ignora su santidad ni su justicia. Al ser santo, Dios no puede aprobar el pecado, ya que contradice su naturaleza pura. Su justicia exige que todo pecado sea castigado, ya que la justicia divina es absoluta y perfecta. Romanos 6:23 nos recuerda que "la paga del pecado es muerte", y que la consecuencia del pecado es separación de Dios. Sin embargo, su amor y misericordia ofrecieron una solución a este dilema: Jesús tomó sobre sí mismo nuestro castigo, cumpliendo la justicia divina y mostrando el amor más grande.

3. La Máxima Expresión del Amor de Dios 1 Juan 4:10 define este acto de amor: "En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que Él nos amó a nosotros, y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados." El término "propiciación" (significado: el acto de apaciguar o satisfacer la justicia divina) representa el sacrificio de Jesús, que es el pago por nuestros pecados. Así, Jesús nos conecta con Dios, quien anhela una relación con cada persona.

Palabras Poco Comunes y su Significado:

  • Propiciación: La acción de satisfacer la justicia divina; el sacrificio de Jesús que reconcilia al hombre con Dios.
  • Inmutable: Que no cambia ni puede cambiar; una cualidad absoluta de Dios.
  • Santidad: Pureza absoluta y perfección moral; una característica intrínseca de Dios.

Citas Biblicas de Apoyo

Romanos 5:8: “Pero Dios demuestra su amor por nosotros en esto: en que cuando todavía éramos pecadores, Cristo murió por nosotros.”

2. 1 Juan 4:9-10: “En esto se manifestó el amor de Dios en nosotros: en que Dios ha enviado a su Hijo unigénito al mundo, para que vivamos por él. En esto consiste el amor: no en que nosotros hayamos amado a Dios, sino en que él nos amó a nosotros y envió a su Hijo en propiciación por nuestros pecados.”

3. Efesios 2:4-5: “Pero Dios, que es rico en misericordia, por su gran amor con que nos amó, aun estando nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo. ¡Por gracia ustedes han sido salvados!”

4. Salmos 103:11-12: “Tan grande es su amor por los que le temen como alto es el cielo sobre la tierra. Tan lejos de nosotros echó nuestras transgresiones como lejos del oriente está el occidente.”

5. Juan 15:13: “Nadie tiene mayor amor que este, que uno ponga su vida por sus amigos.”

6. Tito 3:4-5: “Pero cuando se manifestó la bondad de Dios nuestro Salvador, y su amor para con los hombres, nos salvó, no por obras de justicia que nosotros hubiéramos hecho, sino por su misericordia.”

Aplicación y Reflexión 

Aceptar el amor de Dios significa reconocer y agradecer el sacrificio de Cristo, entender que no necesitamos ganarnos Su amor, sino recibirlo. Este amor nos transforma y nos invita a vivir con un propósito renovado. Nos llama a alejarnos de la oscuridad, representada por los caminos que nos separan de Dios, y a vivir en la luz, reflejando su amor y verdad.

La invitación a aceptar el amor de Dios es abierta a todos. Juan 3:16 no es solo una promesa de vida eterna, sino una invitación a vivir una vida llena de propósito, paz y amor. ¿He aceptado este amor plenamente? ¿Vivo de acuerdo con el propósito que Dios tiene para mí?

Oración

Señor, gracias por tu amor incondicional y por enviar a tu Hijo como muestra de ese amor. Ayúdame a vivir una vida que refleje tu luz y tu amor. Te entrego mi corazón y acepto el regalo de salvación que me has dado. 

Gracias por amarme a pesar de mis fallas. Amén.

 

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