Ofrenda de Cain vs la de Abel

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Texto Genesis 4:1-5

1 Conoció Adán a su mujer Eva, la cual concibió y dio a luz a Caín, y dijo: Por voluntad de Jehová he adquirido[a] varón. 2 Después dio a luz a su hermano Abel. Y Abel fue pastor de ovejas, y Caín fue labrador de la tierra. 3 Y aconteció andando el tiempo, que Caín trajo del fruto de la tierra una ofrenda a Jehová. 4 Y Abel trajo también de los primogénitos de sus ovejas, de lo más gordo de ellas. Y miró Jehová con agrado a Abel y a su ofrenda; 5 pero no miró con agrado a Caín y a la ofrenda suya. Y se ensañó Caín en gran manera, y decayó su semblante.

CON QUE CORAZÓN ENTREGAS TU OFRENDA AL SEÑOR TU DIOS.

Este es una porción de la escritura que me llevo a una tremenda reflexión en mi vida, pero antes quiero definir lo que significa lo más sencillo posible la palara ofrenda.

Ofrenda: Cosa o servicio que se ofrece como muestra de respeto y amor a Dios.

Observamos que Abel fue pastor de ovejas y su hermano Caín fue labrador de la tierra y ambos ofrecieron ofrendas al Señor, aparentemente ambos entregaron su servicio, muestra de respeto y amor por Dios lo cual no esta mal, pero surge la pregunta: Porque Dios aceptó la ofrenda de Abel y rechazó la de Caín, a caso tenia Dios favoritismo con uno y con otro no?

La respuesta es que Dios lo amaba a los dos, porque Dios no hace acepción de personas (Deuteronomio 10:17). El problema radicaba  con la actitud, entrega y corazón que Caín estaba ofreciendo su ofrenda.
Vemos en los versiculos 3 y 4, que desde sus respectivas áreas ambos ofrecieron sus ofrenda pero Caín ofrendo su fruto de la tierra, ya que explicamos que era labrador de la tierra pero con que corazón la ofreció, en realidad eran las primicias de los frutos de su cosecha, eran los mejores, sin embargo de Abel dice que trajo los primogénitos de su ganado, es decir trajo de lo primero para Dios y no obstante a esto tuvo que hacer un trabajo en ello, o sea tuvo que dedicarle empeño, cuidado y amor para engordarlos para ofrecerlo al Señor. Ahi esta la diferencia entre estos dos hermanos.

En nuestra ofrenda a Dios debemos darle lo primero de todo con un corazón y actitud de amor. Porque esto lo expresa el gran mandamiento en Mateo 22:37.- Jesús le dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con toda tu mente.

Mi querido lector, quisiera que al igual que yo reflexionaramos y aplicaramos esto, porque Dios ha sido bueno con todos nosotros. Vamos a darle lo mejor a él, ya sea de nuestro tiempo para ayudar a otros, nuestro servicio en la iglesia, nuestro tiempo devocional diario con el Señor, de nuestra cosecha, es decir de todo lo que el nos proveé, saquemosle la primicia porque él se la merece.

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